En apariencia era un chocolatín común y corriente, pero que al ofrecérselo a tus amigos...¡zas! flor de chasco al mojarse. Es de plástico, y tiene en un extremo un agujerito con tapita por donde se lo llena con agua, y en el otro extremo un agujerito más pequeño, que al presionarlo hace que salga un chorrito de agua.
Una forma muy inocente de divertirse en carnaval, comparada incluso con las bombitas de agua, ya que el agua que sale no es una gran cantidad, pero doy fe que me entretuve varios veranos con él, y todavía funciona...aunque para sacar la foto, más que el chorrito que sale se ve que me mojé mi propia mano, jaja!
Si alguien quiere chocolatín, compro uno en el kiosco, porque este no es para convidar!
Bien, acá gracias a Omar-citus que me envío publico la tapa del ejemplar del 21/02/74. En las manos de Hijitus tiene otro gustito, jeje!
Buenas noches Magdy! que linda que está esta sorpresita, la verdad que parece un chocolate de verdad si hasta dan ganas de darle un mordisco y todo, con respecto a número del ejemplar donde salió este hermoso chiche te cuento que fué en el número 467 para el carnaval de 1974 y la fecha exacta es el 21/02/74. Te acabo de enviar un mail con la tapa de este ejemplar por si querés agregarla a este post. Abrazitus!!
ResponderEliminarVamos Magda!! yo tengo uno igual...VISTE QUE REAL ES? .
ResponderEliminarLa próxima reunión lo podríamos llevar y mojar a todos los nenitos.
Gracias, Omar-citus, ya publiqué la tapa.
ResponderEliminarRealmente Marisa, tienta de comérselo, jaja!
Jjajaajj yo lo tenía y fui tan bestia que me lo llevaba a la boca... todo mordido habia quedado...
ResponderEliminarbuen post Magda!
saludos a todos!
¡¿Querés creer que a ese número de la revista lo tengo!? Yo tenía dos añitos, pero una prima me lo compró y regaló. Al chocolatín ya no lo tengo, porque se lo dimos al perro de ella para que jugara. Lo tuvo entre sus cosas durante años,porque lo mordisqueaba pero no lo rompía. Durante años, de vez en cuando, me divertía llenar de aguar ese chocolatín de goma todo mordisqueado por el perro...Jajajaa. El perrito - un pequinés muy gracioso - murió a fines de los 80' - pero el chocolatín sigue en casa de los padres de mi prima junto a otros chiches dejados por el can...¡Otra vez se me pianta un lagrimón!
ResponderEliminarUn besote
Vane.
Qué lindos recuerdos, chicos! Parece que estaba para morderlo nomás, jaja!
ResponderEliminarVaneeeeeeeeeee para matarte!! como que le dieron el choco al perro?
ResponderEliminarjajaja Dios!